Aprovechando que hay poco que hacer cerca de los libros… ¡a salir de tuna!
Después de cenar y con nuestra puntualidad característica nos fuimos de ronda para pasar un buen rato bebiendo y cantando.
Para terminar la noche nos acercamos al paso de Ecuador de Farmacia para dar un toque de amarillo entre tanta futura beca morada.
Podremos sonar mejor pero no sonreir más en las fotos…